Es cierto que tenemos muchas actividades diarias que hacer y que incluso la noche es válida para completarlas, pero ¿sabías que irte a la cama a la misma hora con tu pareja puede afianzar los lazos de amor y fortalecer tu relación?
Acostarse juntos favorece la cercanía entre la pareja, ya que se fomentan las conversaciones de almohada y se libera la oxitocina, conocida como la hormona de la felicidad.
PROTEGE EL AMOR
Coincidir en los hábitos de sueño es un gran factor protector del amor, porque puedes aprovechar ese momento para la comunicación y la intimidad, pero no solo la sexual, sino también la emocional.
“Pueden ocupar ese tiempo para tocarse, olerse, abrazarse, sentir que son ‘uno para el otro’, alentarse o decirse sin palabras ‘estoy contigo’".
EXCUSAS
Pueda que sea difícil implantarnos este hábito, pues es común que tú o él no coincidan en la cama porque se quedan navegando en Internet, viendo la televisión o adelantando algún trabajo.
Sin embargo, es necesario organizarse. Haz los esfuerzos necesarios para lograr una sincronización nocturna con tu amado. Las parejas que no coinciden en sus hábitos de sueño conversan menos, comparten menos actividades, practican menos sexo y tienen más conflictos.
